EL CONOCIMIENTO COMO FACTOR DE DESARROLLO Y CRECIMIENTO ECONÓMICO
El conocimiento y la innovación tecnológica juegan un papel capital en las actividades económicas y, por supuesto, en el desarrollo de las naciones. En este contexto y de acuerdo con Echevarría (2003), hablaremos de conocimiento tecno-científico, y en tanto este constituye la base de la nueva economía, de economía informacional. La sociedad actual es denominada la sociedad del conocimiento y una de sus características más relevantes es el fenómeno de la globalización, o de las globalizaciones, con lo cual ponemos en evidencia, que la única globalización no es la económica, sino también la del conocimiento (tecno-científico), por lo que también la podríamos denominar tecno-globalización.
Si miramos al marco teórico y a las teorías económicas existentes, podemos constatar que los clásicos como Adam Smith y David Ricardo no se enfocaron en la información ni en el conocimiento. En el modelo clásico, la función de la producción conoce tres recursos: tierra, trabajo y capital, y nada más. La función de producción describe la relación cuantitativa entre el insumo y la salida del proceso de la producción. Es decir, la salida está determinada por el insumo, y el insumo en este modelo es tierra, trabajo y capital.
Hoy en día observamos que la producción de conocimiento, dentro y fuera de las empresas, funciona bien; así hemos llegado a la denominada sociedad del conocimiento. Cada día se publica más información de la que un solo individuo puede procesar
A este respecto, la serie anual de informes No 21, que publica el Banco Mundial, constituye un documento valiosísimo para poder comprender la inserción del conocimiento como base de una nueva economía basada en este recurso.
Según el mismo “el crecimiento económico y el bienestar son abordados no ya desde la perspectiva de la producción de bienes sino desde la perspectiva del conocimiento”.
Este informe muy bien puede considerarse como el punto de partida para la creación de una nueva ciencia económica basada en el conocimiento como agente productor de riqueza.
Sin embargo, la consecuencia de la explosión de la información y del conocimiento es que la vida se presenta más compleja y el individuo sabe relativamente cada día menos. Para la mayoría de los problemas que se presentan hoy en día es básicamente imposible tener informaciones "perfectas" para tomar decisiones o elaborar planes.
El austriaco Friedrich August von Hayek teorizó acerca de la importancia de la información dentro del sistema económico. Según él, la información y el conocimiento son dispersos y no todos los individuos tienen los mismos.
Hoy en día podemos observar empresas que básicamente generan sus productos y servicios con muy pocos recursos físicos. Por ejemplo, empresas de la Web 2.0 como Facebook o Twitter, que son especializadas tanto en el cultivo de las relaciones sociales como en la participación de sus usuarios (redes sociales), empezaron su negocio usando más bien poco capital (máquinas) y tierra (factores físicos). El factor más usado en estas empresas es el capital humano o el conocimiento (factores intangibles). Hoy en día estos factores cumplen un papel para generar valores agregados.
Si la información y el conocimiento crecen con tasas exponenciales y la transferencia de conocimiento es problemática, la capacidad de aprender a aprender y el concepto del aprendizaje continuo son una necesidad tanto para los individuos como para las empresas.
Conocimiento, ciencia y tecnología deberán encontrarse al alcance de todos, distribuidos de manera tal que se garantice igualdad de oportunidades y posibilidades de lo contrario sólo logrará que la brecha entre países ricos y pobre sea mayor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario